jueves, 12 de abril de 2012

Relato Erótico: Deseoso

Sintió ganas de vomitar pero se las aguantó, afirmándose al Lavamanos vacilante. La toalla no alcanzaba para tapar las ganas de tenerla, pero la diferencia de edad, aparte de tentadora, se hacia todo un desafío, casi un tabú.
Ella, glamorosa, entró con sus transparencias y su experiencia a flor de piel, como sudando o tirándola con cada aliento. El vaivén de sus pechos cautivaba al Inexperto joven, quien solo se tapaba el miembro como podía y miraba la escena, tímido pero hambriento.
Ella dejo caer la seda.
El tiró torpemente la toalla.
Con un movimiento de esos que se usan en las películas, ella lo llamó, fiera indomable, a la cama. El chiquillo corrió a los brazos de la fémina, ansioso por probar del néctar del que tanto le habían hablado.
Para ella era un golpe de energía que le renovaba hasta lo más profundo de su espíritu.
Para el... bueno, el mismo asunto del Néctar.
Se besaron de forma salvaje, casi desesperada. No se podía distinguir cual de los dos era el inexperto o el vivido, ambos, recorriéndose como si no hubiera un mañana, sacándose lo ultimo que tenían puesto, tocándose, humedeciéndose, riendo en felicidad y de placer.
Coincidieron en el punto de encuentro, y balanceándose siguieron con el ritual. Así que esto se siente, pensaba el chiquillo, apretando sus manos contra los pechos salvajes de la mujer. Ella se mecía lento pero Firme, apretándose cada vez más, tomándose el pelo y sonriendo hacia el cielo.
La intensidad llenaba la pequeña habitación. Se oían los gemidos y los quejidos, la cama rechinaba, testigo directo de la extraña mezcla aquella, de inexperiencia y ganas de energía, de placeres prohibidos y cosas así.
Y luego, el húmedo clímax. El final de un cuento, feliz en la mayoría de las veces.
El Chiquillo quedó tirado ahí, pegado al techo, sonriente y satisfecho.
Ella encendió un cigarrillo junto a la ventana.

- Sabes que si quedo embarazada, serás padre de un niño que también sera tu primo, ¿no?

Al Chiquillo no le interesaba. Habia logrado su objetivo de deseo. Se levantó y se apoyó en el hombro de su tía. Probablemente vayan por otra más.

1 comentario:

  1. Exelente historia ...me fascina todo lo que escribes...asi que seguire tu blog ....exito.!

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